Las malas relaciones sociales afectan el sistema inmunitario estimulando la producción de sustancias inflamatorias que a su vez favorecen la aparición de varias enfermedades.

Las enfermedades cardiovasculares, la primera causa de muerte en los países ricos, es el doble para las personas afectadas por depresión, enfermedades mentales o que se consideran infelices.

Tener amigos, relaciones amorosas, pertenecer a grupos y asociaciones, tener identidad y apoyo social son la mejor tutela para la salud. Además del estrés, en las primeras fases de la vida, incluso en la etapa prenatal, tiene una importancia significativa en el desarrollo físico, emotivo, cognitivo y sobre la salud durante toda la vida.

Pero para ser felices tenemos que tener relaciones de buena calidad, es decir, cargadas de vitalidad, participación y afecto. Todos necesitamos sentirnos parte de algún grupo, ya sea parental, familiar, de pareja, de comunidad, de amigos o de trabajo.

Por eso, si queremos resumir qué es lo que nos hace felices según estos estudios nos bastarían dos palabras: los demás.